Hace unos días leía y reflexionaba sobre una información de Internet sobre la mala imagen que muestran algunos de los dibujos animados sobre las mujeres en cuanto a esterotipos negativos. Ya había tomado conciencia de este aspecto en un curso que hice sobre coeducación y reparé en aspectos que antes habían pasado ante mí inadvertidos. Por ejemplo, ¿Por qué siempre cocina la mamá de Teo? ¿Por qué los papás se sientan a leer los periódicos? ¿Por qué algunas mamás son gritonas y se vuelven locas con las compras compulsivas como la de Chin Chán?
Algunas series de dibujos animados deberían estar premiadas por su poco valor educativo. Por ejemplo, las super mega famosas Monster High son adolescentes que únicamente se preocupan por tonterías y por su estética o los novios que tienen o dejan de tener. La mayoría de cargos políticos o de importancia son ocupados por hombres y además es alarmante el tema de la raza, ya que es raro que aparezcan personajes distintos a la raza blanca.
Ante todos estos aspectos de esta mala imagen, estamos delante de una tremenda desigualdad de género y raza que no debería existir ya que para empezar, no refleja la realidad.
Deberíamos tomar conciencia todos en general y limitar este tipo de dibujos animados premiando aquellas como Caillou, que tiene un mayor valor educativo y servirán para aprender, y no para desaprender.
Todos estos aspectos los revela un estudio que han realizado expertos de la Universidad de Granada. Concepción Alonso y Jesús Pertiñez son los autores de este estudio que pone de manifiesto la importancia de seleccionar lo que nuestros pequeños y pequeñas absorben a través de la pantalla. La mayoría de mujeres/madres de las series animadas son consumistas, superficiales, celosas y obsesionadas por su aspecto físico, según el estudio. En este estudio se han tenido en cuenta nada más y nada menos que 163 series distintas de dibujos animados que se emiten actualmente.
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