Se acerca el momento de hacer el cambio de ropa de temporada de verano a la de invierno, ahora precisamente que empiezan las lluvias y la ropa tarda mil horas en secarse. Ahora que parece que el tiempo no da tregua para poder echar esas mil lavadoras que tenemos pendientes y que hace que se nos acumulen colchas, mantitas y toda la ropa de los peques que hemos pensado que les servirá este año.
En el caso de los bebés, para el cambio del armario hay que tener en cuenta algunos aspectos que te harán quedarte con algunas piezas de las que seguro pensabas deshacerte.
Por ejemplo, seguramente creas que los pantalones de verano ya no le valdrán el año que viene pero si tu bebé todavía usa pañal piensa que el próximo año seguramente se deshaga de él con lo que menguará bastante la parte del culete e incluso se estirará de la cintura.
Mi consejo es que lo guardes todo, a excepción de aquello que ya sabes que le va corto, le aprieta o se vea muy gastado. Algunos trucos para aprovechar mejor la ropa de los peques y que les dure más de una temporada pueden ser los típicos de remendar pantalones o incluso cortar los pantalones para hacer piratas siempre que les queden bien de cintura.
Suelo utilizar la ropa cómoda que se ve más gastada para estar por casa o ir de excursión, porque además los y las peques suelen ensuciarse la ropa bastante a menudo y es muy práctico tener bastante ropa “de batalla”.Si además te gusta la costura seguro que se te ocurren muchas más opciones para darle nuevas vidas a las prendas de tus peques. Una amiga me explicó que una abuelita incluso deshacía los jerseys de lana que les había hecho a sus nietos para hacer unas preciosas mantitas de ganchillo para el sofá. ¿Y tú, reciclas?
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