Ahora que entran en casa catálogos de juguetes por doquier, es cuando podemos valorar si las jugueterías invierten en formación sobre coeducación de su equipo de diseño gráfico o el responsable de diseñar la publicidad.
Cada vez me resulta más molesta la separación de los catálogos entre el apartado de rosita para niñas y el de los niños, e incluso los he llegado a ver que especifican por sección “Niño” y sección “Niña” siendo la de estas últimas un armamento de muñecas y complementos del hogar digno de la época de la transición.
La empresa que dirige Ignacio Gaspar, Toy Planet, ha querido reivindicar el sexismo que existe todavía hoy en muchos de los catálogos de juguetes subiendo a motos de cross a lindas niñas vestidas eso sí, casi con vestido de tul y al manejo de un lindo y rosa carrito a niños como el mío, al que le encanta pasear al bebé.
Hace tiempo otras empresas ya iniciaron esta andadura e incluso Playmobil se encontró con trabas para comercializar un equipo de fútbol femenino durante el mundial de 2010.
Siendo los y las peques esponjas me parece importante que vean como situación normal el que un niño quiera jugar con una casita de muñecas o poner una lavadora, al fin y al cabo, dicen que es educar y le llaman juego de imitación. ¿A quien pretenden que imiten los catálogos sexistas en los cuales los niños no llevan carritos?
Los roles han cambiado y la igualdad entre el sexo masculino y femenino está cada vez más cerca, así que…¿Por qué motivo debemos ir para atrás mostrando unas escenas no realistas? Hoy en día ponen lavadoras, pasean a bebés y planchan tanto hombres como mujeres.La iniciativa de esta empresa tiene como finalidad la lucha contra los estereotipos. Bravo.
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