En la piel del bebé podemos encontrar manchas, granitos o coloración amarillenta, entre otras cosas. Estas alteraciones son frecuentes en la piel del bebé recién nacido, pero no son preocupantes, pues suelen desaparecer solas con el paso del tiempo. No obstante, ante cualquier duda que tengamos o si el bebé muestra malestar, valorar por pediatra.
- Angiomas: son pequeñas malformaciones vasculares. Aparecen
como manchas planas, o abultadas (según el tipo de angioma), de color rosa, rojo pálido o incluso rojo oscuro y que aparecen, sobre todo, en la nuca, párpados y frente, aunque pueden aparecer en todo el cuerpo. Se localizan en la piel o debajo de ella. En la mayoría de los casos sólo crean pequeños problemas estéticos .Entre el 2 y el 10 % de los recién nacidos los presentan. Afecta con mayor frecuencia a las niñas.
Hay varios tipos de angiomas, y tienen muy diferente nomenclatura y
características. Además el tratamiento, o la desaparición de ellos, va a depender de la forma, y la zona donde se encuentre el angioma. Cada caso es independiente, y el dermatólogo sabrá valorar las diferentes
opciones. Tu pediatra te indicará la conveniencia de consultar con un especialista para descartar otros problemas dermatológicos. Si desaparecerá por sí solo, o si se tendrá que eliminar por otras vías, te lo dirá el especialista que valore el caso.
- Mancha mongólica: también llamada melanocitosis dérmica
congénita, suele aparecer en el nacimiento o durante las primeras semanas de vida. Aumenta en los 2 primeros años y después desaparece de modo gradual. A los 10 años la mayoría de estas manchas han remitido. Su frecuencia, similar en ambos sexos, varía entre los distintos grupos raciales. Es importante destacar que no existe ninguna relación de estas manchas azules con la enfermedad del síndrome de Down o mongolismo, más allá de su nombre. El término «mancha mongólica» se debe a su frecuencia elevada en las razas orientales, sobre todo en los mongoles, en quienes aparece en el 90% de los recién nacidos. Se observa en el 80% de los individuos de raza negra, en el 40% de los latinos y en menos del 10% de los caucasianos y judíos. La localización suele ser en la parte baja de la espalda y el culito. Tienen una coloración homogénea azul grisácea.
- Exantema toxo alérgico: Es una erupción con lesiones semejantes a un granito de color blanco amarillento rodeado de un halo rosado, denominado “eritema tóxico del recién nacido” “urticaria
del recién nacido” “dermatitis por picadura de pulga” etc. Es la erupción más frecuente en el neonato, afectando a aproximadamente la mitad de los recién nacidos a término, siendo rara en el prematuro. Este exantema se localiza en cualquier parte del cuerpo aunque el lugar más frecuente es el tronco, respetando casi siempre palmas y plantas. Desaparece con el paso de las semanas, sin dejar cicatriz.
- Descamación fisiológica en el recién nacido: En un gran porcentaje de recién nacidos puede verse una descamación de la piel en la zona de las muñecas, dorsos de manos y pies, rodillas, y en algunos casos en tórax. Aparece dentro del primer y segundo día de vida, desapareciendo en forma espontánea hacia la tercera o cuarta semana de vida. Se observa la piel “despellejándose” .Ocurre muy frecuentemente en bebés que nacen más allá de las 41 semanas de embarazo, es un signo de postmadurez. La mejor forma de tratarla es hidratando al bebé tras el baño.
- Millium facial: Pueden encontrarse también en la cara de los
recién nacidos elementos puntiformes que semejan “espinillas” sobre las alas de la nariz y de color amarillento que se denominan millium facial o quistes sebáceos, éstos desaparecen espontáneamente al segundo o tercer mes.
