Cosas que todas las mujeres pensamos en el parto

Hace poco hablando con unas mamás lo pasé bien porque todas coincidíamos en pensamientos que tuvimos en nuestros partos (nosotras dio la casualidad que fueron todos partos naturales, sin anestesia y con todo el dolor del mundo). Es curioso porque todas pensábamos cosas muy parecidas y por eso hoy quiero compartir contigo cosas que todas las mujeres pensamos en el parto.

No voy a tener sexo nunca más

Obviamente esto no es verdad, pero en los momentos de las contracciones lo último que quieres pensar es en el sexo ¡eso fue lo que provocó el embarazo!

¡Todo es culpa tuya!

Esta me divierte porque es totalmente cierta, cuando estaba en el paritorio y tenía a mi marido al lado, habían momentos de complicidad y ternura, pero en otras ocasiones (y por culpa de las hormonas), le gritaba que era culpa suya. ¿Por qué no pueden sentir los hombres aunque fuesen 5 minutos lo que nosotras tenemos que sentir durante todo el parto? Es fácil, no creo que lo aguantasen…

¿Me he depilado?

Cuando vas de camino al hospital y ya empiezas a sentir los primeros dolores, a veces se pasa fugazmente un pensamiento para recordar si te has depilado o no. Pero cuando el dolor aumenta y realmente recuerdas que no te dio tiempo de rasurarte entera ¿a quién le importa? ¡Los pelos no van a ser los protagonistas en el parto!

¡A mañana no llego!

Las contracciones duelen, empujar duele, esperar las horas para dilatar mientras tienes contracciones ¡también duele! Por muy preparada que vayas mentalmente, hay algún momento en el que tanto dolor descontrola la mente… ¡a mí me costaba hasta respirar de tan seguidas que tenía las contracciones!

Había momentos que pensaba que no lo iba a contar… ahora me río al recordarlo. ¿Cómo no lo voy a contar? Si las mujeres estamos hechas de una “pasta especial”.

Yo puedo… ¡Claro que puedo!

¡Pues claro que se puede! El momento de pujar es un momento muy especial que solo las mujeres entendemos. Y aunque creas que cuesta o que tarda mucho en salir… el bebé saldrá, nacerá y pronto estará en tus brazos. ¡Grita lo que tengas que gritar!

Pasaría por esto cien mil veces más

Y cuando ya tienes a tu bebé en brazos, sabes y sientes que si tuvieras que pasar por lo mismo cien mil veces más… lo harías una detrás de otra con todo el amor y todo el cariño del mundo.

¿Qué pensabas tú cuando estabas en el parto?

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