La doctora estadounidense Glenn Doman es la autora de varios libros de estimulación para bebés y niños. Entre ellos hay un método, llamado Método Doman, que es para enseñar a leer incluso a bebés, que consiste en presentar durante varias veces al día y de forma rápida unas cartulinas con palabras enteras impresas a la vez que se leen.
Se basa en que el bebé aprende cómo se interrelacionan las letras sin necesidad de conocer el abecedario.
El libro explica algunas cosas útiles, independientemente de que los padres estén o no de acuerdo con la estimulación temprana. Doman explica por ejemplo que cuando le hablemos al niño o niña es importante que lo hagamos con un vocabulario rico y variado. La autora de este libro pone como ejemplo el caso de un niño que ve un perro, y el padre o el adulto que en ese momento lo acompaña le dice: es un guau guau. Pues no. Error. No cuesta nada decirle al niño que es un perro, y además si conoces la raza le puedes dar más detalles y decirle que es un Terrier o lo que sea.
Este método como la mayoría de los métodos de estimulación temprana fueron diseñados inicialmente para niños con algún retraso o lesión cerebral pero al ver que funcionaba Doman lo aplicó al resto de niños para potenciar la capacidad de aprendizaje.
En este vídeo podéis ver un bebé que lee con doce meses dos idiomas.
Para que el método de enseñar a leer funcione hay que ser muy riguroso, hacer las presentaciones de forma rápida y varias veces al día e ir añadiendo y eliminando grupos de palabras empezando por las del entorno o el propio cuerpo que serán las más familiares.
Y yo me pregunto, lo de dar un vocabulario rico y variado vale, porque es una herramienta que le estás dando para saber expresarse mejor y hacerse entender además de hablar, que no es lo mismo pero…¿el leer a los doce meses para qué?
