Recientemente, la ministra Ana Mato ha explicado que la conciliación familiar (sí, aquello tan complejo que os explicaba en un post anterior) será tenida en cuenta en un futuro de cara al trato fiscal mejorando el trato a las familias con hijos. Este hecho pretende llevarlo a cabo dentro del Plan Integral de apoyo a las familias que el Gobierno actual va a presentar en breve. Habrá que ver que tipo de medidas contempla el Plan apoyo a la conciliación familiar y en qué nos afectará.
El Plan Integral de apoyo a las familias surge en parte de la necesidad de llevar a cabo y cumplir medidas relacionadas con el Día Mundial de la Infancia, que incluyen como básicas el alojamiento, la educación o la alimentación de los pequeños y pequeñas.
Y digo yo… mejor que tomar medidas de conciliación en el área fiscal y que las personas que tienen rentas puedan deducirse más o menos dinero y en consecuencia obtener más o menos devolución o pago… ¿Por qué no atendemos antes a las personas que directamente no tienen renta que fiscalizar?
Porque Sra. Mato, a mí me da, por lo que se ve y se lee en los medios de comunicación, que hay familias que directamente no tienen ni para comer. ¿El Plan de apoyo a la conciliación familiar contemplarán también las familias sin rentas? ¿Y que pasa con las personas sin rentas y sin hijos?
Mientras el Instituto Nacional de Estadística indica que el 21,6 % de la población de nuestro país vive por debajo del umbral de pobreza… el diputado de Convergència i Unió Carles Campuzano señala que el Estado del bienestar en el que se supone que vivimos y que nos explican en las universidades está orientado a proteger a los mayores de la pobreza pero no a la familia ni a la infancia. En su blog podemos leer que la pobreza infantil ha aumentado por la falta de políticas que den soporte a la familia y a la infancia y por la destrucción masiva de empleo.
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